LA HIEDRA


Por Alcides Cruz

La hiedra es el vivo ejemplo de la política de organizaciones sociales que antes defendían el modelo; la hiedra usa al árbol para expandir su espacio de oxigenación y nutrición. Crece y crece hasta que ahoga el árbol que le dio sus ramas para sostén; la hiedra solamente piensa en la hiedra; bastó una herida para esta se convirtiera en gangrena de los afectos; se pudrió todo cuando el ex presidente Néstor Kirchner mudó su estrategia de sustentación política en el PJ. ¿Será que avizoraron que con el PJ en el medio No había lugar para seguir construyendo un formato de neto corte centroizquierdista? Reclamos como el NO pago de la deuda son legítimos pero NO se puede desconocer que el país a nivel mundial entró en default y NO fueron los gobiernos de Néstor o de Cristina quienes lo llevaron a esa situación.
La deuda social interna es muy grande, pero nuestro gobierno ha dado sobradas muestras de acción directa contra la pobreza. La disputa de los movimientos sociales adversos al gobierno No pasa por el reclamo de la situación social sino que esa es la pantalla que usan para esconder sus verdaderas intenciones; se trata de buscar por cualquier camino los recursos para la supervivencia de un plan de expansión territorial y de la caja de movilización.
De todas maneras no se alcanza a comprender una sola actitud; una única incomprensión; pretenden que el gobierno los siga sustentando con sus planes sociales, en la ridícula esperanza que trasvase fortaleza al crecimiento de sus organizaciones, que no tardarán en “volar al revés”; nadie facilita al contrario las herramientas para que luego se vuelvan en contra. No hay que olvidar un precepto: no podes morder la mano del que te da de comer. Es muy simple de entender; entonces como pueden reclamar en nombre de un pasado de apoyos si ahora se plantan en la protesta y el reclamo unidos por afanes de la ultraizquierda.
En política valen los instantes presentes y continuos. Se está o no se está. No hay medias tintas. Es increíble que en nombre de este proyecto que conduce el kirchnerismo algunos compañeros alcanzaron cargos electivos y hoy se pronuncian contrarios; se pasaron de bando olímpicamente y se juntan con los que a diario serruchan la razón de ser de tamaño esfuerzo popular; se puede criticar pero se debe permanecer en la lealtad, sino es algo parecido a la traición; porque al fin y al cabo, termina siendo apenitas una cuestión “ afinidad” el basamento para caminar juntos pero no una comprensión de la necesidad de la unidad conceptual para defender el plano nacional y popular del avance de la derecha. No se trata de saltimbanquear de aquí par allá con el sólo criterio de ir ganando espacios de poder y gestión. Si se tiene razón se espera la verdad que es florecida por la realidad. Ratas que huyen por los pasamanos del barco y amigos políticos que acompañan hasta la puerta del cementerio es lo más común entre los que llenan la boca de fidelidad a la hora de los triunfos. Para “fiel” es mejor comprarse un perro. Con acompañantes así, que están por el negocio de la política, por el cargo y la prebenda, no conseguiremos ni siquiera hacer los cimientos de un plan de liberación. Los cargos y las prebendas se terminan. Y una vez que éstos se acaban, se va también la convicción de luchar por un país que no sea pasto del neo liberalismo, hoy vivito y coleante.
La primera liberación que nos debemos los que creemos en causas nacionales y populares, es la liberación de los vicios que criticamos en el otro. La hiedra es una enredadera que se comporta como el neo liberalismo. Succiona las energías del árbol que le da sustento. Así no vale muchachos. Es increíble ver que entre sus militantes hay muchos compañeros de gran valía, honestidad y lucha dentro de los ideales del peronismo; el General Perón – les recuerdo – decía que al amigo todo, al aliado negociación y al enemigo ni justicia.